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Rebeldía Femenína

Voy a llamarle así y no feminismo, porque como muchos términos femeninos, este también ha sido tomado y conectado con negatividad. Creo que el feminismo nació en un momento muy necesario, en un momento de mucha ira de parte de las mujeres y por supuesto que ha cambiado y que no todas estamos de acuerdo con todo lo que sugieren. Pero cómo no decir que era necesario cuando las mujeres no teníamos ni voz ni voto, cuando una mujer en los años sesenta ni tan siquiera podía abrir una cuenta en el banco sin permiso de su esposo! En general soy partidaria de la igualdad humana, creo que todos los seres humanos sin importar su sexo, su preferencia amorosa, su religión o su raza tienen derecho a tener alcance a todos los recursos que su entorno tenga para lograr su bienestar y el de su familia. Nadie debe limitar el acceso de nadie a los recursos de la comunidad. El movimiento surgió de esa ira justa masiva con un sistema que continuaba sin darle a la mujer un lugar igual al del hombre cuando somos capaces de trabajar y producir a la par.

La semana pasada compartimos en Three Corazones con un hermoso grupo de mujeres de todas las edades, que sintieron el llamado a conectar con la Diosa, nuestra Tarde de Diosas fue todo un éxito porque vimos en las mujeres presentes esa semilla de re-conectar con la esencia femenina, con lo que es ser mujer, ser la representación de la madre naturaleza en creación humana. Una de nuestras invitadas habló sobre la Diosa y su historia en la humanidad, @samisanacion nos compartió mucho del proceso por el que ha vivido la mujer en la sociedad y de cómo eso nos ha desconectado (y lo sigue haciendo) de nuestra esencia. Una de las cosas que nos contó me impactó muchísimo, porque nunca lo había visto desde ese ángulo. La primera forma de exclavitud que ejerció el hombre fue con la mujer, cuando nos hicimos sedentarios y empezamos a sembrar y trabajar la tierra, el hombre vio que necesitaba no solo la tierra sino los trabajadores, y la mujer era la que podía producir humanos… Así surge entonces la primera forma de exclavitud, compartir a las mujeres para que produjeran trabajadores, no permitirles decidir sobre sus cuerpos, sobre sus familias e incluso sobre sus sentimientos. Las mujeres eran (y sigue sucediendo en algunos lugares) entregadas a hombres con tierras para hacer intercambios, u otra tribu como alianza. Me acordé del Rey Arabe que unió a Arabia Saudita, tomando una hija de cada tribu, teniendo un hijo/a con cada una para que así todos fueran hermanos. Conquistó con la entrega de mujeres.

Hoy te quiero presentar a la primera rebelde femenina, su nombre es Lilith. Ella es una Diosa, una figura femenina de la tradición Hebrea. Aprendí de ella hace unos años y realmente me fascino su historia, pero me ilustro aún más como llevamos tanto tiempo con conocimiento que nos oculta o se nos “ajusta”. Lilith fue la primera mujer, la primera esposa de Adan. Lilith fue creada del mismo barro que Adan, con el mismo soplo de vida. Pero Lilith tenía un pensamiento propio y no quería estar por debajo de Adan, ella quería estar a la par. Cuando Adan se fue a quejar con Dios de que esta mujer no quería ser obediente y servil, Dios la mandó a sacar del paraíso y le dijo a Adan que le diera una costilla para el hacer una nueva que fuera de él, y que estuviese siempre a su lado. Y así nació Eva… Pero este patriarcado que se estaba formando no contó con el regreso de Lilith, ella en su inmensa sabiduría regresó en forma de serpiente para darle a Eva el conocimiento (en forma de manzana). Ya sabemos que pasó después… el entendimiento llegó al hombre, la iluminación, y fueron desterrados del Paraíso. No solo la historia de Lilith fue eliminada de la Biblia si no que también se empezó a utilizar el nombre con sinónimo de un demonio, y su nombre pasó a la historia.

Si este mito, y las otras historias todavía hace que la sangre te hierva, está bien, es el llamado de la injusticia dentro de ti, y que las mujeres sentimos muy profundamente por las heridas que llevamos. Todavía desafortunadamente falta mucho por hacer, así que debemos seguir en la lucha, y no permitir que echemos hacia atrás por una separación de términos, que si somos o no feministas. Yo soy humanista, y quiero para todos libertad, educación, entendimiento, acceso a recursos, evolución…

Namaste
-Damaris Chiari